Desde que te tengo sé tener


Sacas lo mejor que hay en mí.
Es así, simple, difícil de hacer solo,
subido a esta silla,
a este mundo sin aire.
Sacas lo mejor, lo implícito,
lo ceñido al corazón que cuelga dentro de mí:
letras, lentitudes, pausas, comienzos,
me haces ojos pluma,
sacas de la curva columna de mi espalda troncos de árbol,
raíces que dibujan mis costillas,
hojas que se pintan por mi cuerpo.
Callejeas por mi cabeza a pasos repetidos,
haciendo sonar tu paraguas libélula en la bajada de mi nuca.
Haces sin hacer y me haces.
Me sumas, multiplicas, me vuelas sobre el mar
con la cordura del que es cuerdo solamente
cuando quiere.
Tengo los brazos más largos desde que te tengo,
desde que el despertar mañanas coge las agujas
con los dedos del reloj.
Enlazados los tallos abrazo en torno a tu cuerpo dormido.
Desde que te tengo sé tener.
Estelle Talavera Baudet
(A Niko, por estos 12 años con su paraguas libélula en la bajada de mi nuca)